Si no fuera por la legislatura tan poco común que está a punto de acabar, todo esto podría ser normal e incluso aceptable.
Y es que resulta que en menos de un año han pasado tres personas por la responsabilidad de la concejalía de juventud. La renovación y el aire fresco nunca está de más…
Pero lo que ha pasado en Totana no tiene nada que ver con eso: la primera concejala, Josefa Sánchez, ha sido peor concejal de juventud que jamás hubo en nuestro pueblo; se ha ido cargando lo que poco a poco se fue haciendo en otros años, no ha hecho política de juventud seria y al final ha vaciado su concejalía de contenido.
La segunda concejala ha sido Esther Esparza, persona a quien el alcalde ha mantenido en la responsabilidad apenas tres meses y con un verano por medio, de manera que nasti de plasti…
Y ahora Andreo delega en Juan Antonio Ambit, que le ha tocado una vez más juventud. Posiblemente si hay alguna nueva dimisión la concejalía de quita y pon vuelva a rebotarle al nuevo concejal/concejala, porque parece que el alcalde la utiliza como comodín y sea realmente poco el interés que muestra, las pocas ideas que tienen, y la incapacidad de gestión de este equipo agotado.
A ver si alguien es capaz de tener vergüenza política, se arremanga la camisa y se pone a trabajar.
Porque con los jóvenes no se juega.
0 comentarios:
Publicar un comentario